martes, 3 de noviembre de 2009

DAR

Pasé mucho tiempo anhelando todo lo que no me daba el hombre de mi vida. ComO parte de mi recuperación se me alentó a que escribiera esas necesidades. Cortesía, respeto, atención, afecto, comunicción - la lista de cosas en que mi ser querido me habia decepcionado era interminable.
Mi padrino celebró mi honestidad y me indicó que podía tener todas esas cosas en mi vida. Tenía que dar lo que quería recibir y convertirme en lo que quería atraer. Era yo un brillante ejemplo de cortesía y todo lo demás? si no lo era, ya tenía una maravillosa lista escrita de objetivos.
He oído a menudo que reicibmos lo que damos y ahora se que es verdad. A medida que me volví más amable y cariñosa, otras personas respondieron positivamente. TAmbién me sentí mucho mejor conmigo misma. Honestamente puedo decir hoy que todas las cualidades en mi lista existen en mi vida al menos en algunos mementos. No esperaba ni éstos ni otros resultados. Estaba demasiado ocupada concetrándome en mí misma. Pienso que por eso me dio resulado.

Hoy puedo participar activamente en la satisfacción de mis necesidades. Puedo escoger el convertirme en alguien a quien me gustaría tener en mi vida.

Muchos encontramos que al tratar a otros con amor y respeto nosotros mismos nos volvemos imanes de amor y respeto.

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